Soy una mamá emprendedora, con dos hermosos hijos, uno de ellos con diagnóstico TEA. Desde que recibí el diagnóstico, la vida se me puso de cabeza, y el trabajo se volvió más difícil. Tuve que frenar y recalcular, pero cuando quise volver a poner las coordenadas en el GPS me vi estancada.

Hace un tiempo que medito, y llevo un diario de gratitud, pero de alguna forma dejé de verme a mi misma. Y eso es lo que me está faltando para poder volver a despegar. Es por eso por lo que me propuse escribir, durante 60 días, una suerte de diario en el que voy a relatar mi camino. Y decidí compartir en el blog lo que resulte, porque creo que mi experiencia puede inspirar a alguna otra mamá emprendedora a seguir sus sueños.

Así es como el propósito de este proyecto que arrancó como un viaje interno creció hacia algo más grande. Voy a ir compartiendo con vos el tesoro de mi vida cotidiana, con sus desafíos y su encanto oculto. Mientras me esfuerzo por hacer crecer mi negocio independiente desde de mi hogar, espero crear un espacio donde las mujeres en la misma encrucijada puedan encontrar apoyo y paz en su búsqueda por la armonía y el equilibrio.

60 días de inspiración

Lo que busco en estos 60 días de inspiración, es darle voz a temas que resuenan en mi corazón. Mi deseo es ir descubriendo el camino a la creatividad, para lograr encontrar el equilibrio en mi vida profesional y personal, esa misma inspiración que seguro vos también buscás.

Te invito a que me acompañes en este proceso, en el que busco mostrar un poco el desarrollo de la vida como emprendedora y mamá. Seguramente haya días buenos y días malos. Probablemente te hable tanto de lo profesional, como de la maternidad o de otros temas, porque eso es algo que aprendí: soy una y la misma, y todos los temas me cruzan al mismo tiempo.

Espero poder, a través de la palabra escrita, explorar el poder de la intención, la trascendencia de los sueños y la posibilidad de vivir en equilibrio, sin renunciar a mi vocación como madre y profesional.

Para las que me acompañen en este viaje: gracias, gracias, gracias!